A flor de piel.

Como ababol abriendo sus hojas y volvoreta posada en la piel aterciopelada, sintiendo el vaivén onírico del sentido natural. Crepúsculo enfurecido afincado en la punta de mis dedos haciendo mover cada falange, caricias chispeantes que revuelven la danza orgánica. Así te siento cada instante de mi haber. Tímido ocaso haciendose paso al albor de la mañana, conversando con la estructura carnal, susurrando el alma... Pequeña gota de agua deslizandose alegre por sentir que el oxigeno la fusiona con la materia y a su vez la penetra entre las finas capas de piel. Danza sensual alborotando mis sentidos, avivando mi ser.

Rebelión clandestina.

Acaso el fuego desprendido puede abrasar la necesidad de respirar? Tener la potestad de censurar el movimiento, la expresión... Libertad sensorial aplacada por instantes, fuerza mayor que retiene la danza sensible. Teniendo que batallar ante la pedanía de la mañana dejando así un halo de sin sentido a la dulce armonía. Opresión firme que detiene el calor para crear frío helador... Dando tumbos de sensaciones, armando  la carcasa para ser el muro que decida atorar las brasas humeantes que de un soplo ahogan mis órganos más vitales. Cuando abro la ventana, respiro... y si me lo impiden, me revelo... A trozos de hierro mojado dejaré escapar la materia que danza fluida en su química noble.

Hoy quiero hablar.

Descifrando letra a letra, momento a momento el significado de la comunicación. Basta con sentir la musicalidad del momento, el valor de la expresión... el gesto expresado en movimiento sutil. A lo que mi visión percibe, mi cuerpo lo recibe. Silencio... escucha... Ahora es el momento de explorar cada instante del verso bien recitado. Descubrir el sentido de las palabras que sin valor aparente dejan marcada una señal de comprensión, de entendimiento, a lo que yo me pregunto sin alzar la voz... ¿El sonido es más importante que el gesto? De igual forma que hablamos, con nuestro cuerpo comunicamos... Así me ha venido dada la respuesta... Reflexión: Ausencia de sonido, melodía interior.

Visión prismática.

Mas allá de lo que la vista y órgano ocular puede llegar a percibir a corto y largo recorrido, existe un punto de visión que sin tener los ojos abiertos puedes llegar a ver. Tal vez la intuición ayuda a la percepción de objetos y situaciones que jamás podrás atisbar... A lo lejos observo verdaderas maravillas y a su vez tremendos conflictos. Contradicción interna emergente, sentimientos encontrados por visiones prismáticas incandescentes y repetitivas... Pálpitos de corazonadas visibles al sentido óptico, percepción intuitiva a la que quiero ignorar, pero es incontrolable la sensación de conocer lo invisible... obviar el sentido es simplemente hacer oscura la realidad visual.

Tránsito.

Como en una cinta transportadora avanzando en un segmento lineal, alimento mis ojos de objetos profundamente superficiales, cosas que en primera instancia hacen posible la práctica de la subsistencia material. Cuando enfoco a un punto neutro, veo mas, mas allá de lo primario, partículas dibujando figuras queriendo comunicar algo mas que una frase convencional. Voces que se mezclan al paso de la imagen disociada de la trayectoria elegida. Terrible sensación de realidad con un submundo paradógico, denoto profundidad abstracta... En el tránsito del conocimiento descubro al infante que prefiere dormir, jugar, soñar... a la vez reflexiono sobre lo compatible que es volar y caminar... Filamentos alternativos en fase transital.

El camino errante.

Esquirlas clavadas en la suela del zapato repicando al son del transito ascendente. Líquido que empapa la materia en su caminar, calor que ahoga un estado menor... Aún volando atisbo la silueta escondida tras el tejido orgánico incrustado en la tierra, ráfagas de viento desvían la solitaria sensación del querer ser. A priori descubro la esencia libertaria del conocer, a la vez que trago polvo en mi respirar mas profundo... Tremendos ellos, sugerentes espacios huecos entre si... Una a una voy a desgranar las partículas que devoran la trascendente estancia en el ascenso, evitando así precipitar la caída.

Revolución.

¿Quien pretende achicar el sentido que decide hacerse frente al paso del caminar? Cuando veo algo inacabado pierdo el sentido... cuando se cruza la verdad y me azota en la cara dejo de respirar... Almas errantes que toman atajos para poder alcanzar lo ya rechazado. Decisiones bien enfrentadas a la sensibilidad... que buscas? El sentido de la revelación va de la mano con la revolución y para conseguirlo deberemos estudiar cada uno de nuestros sentidos mas escondidos en nuestros cajoncitos internos, bien administrados pero que cuando rebuscamos en ellos dejan de tener sentido y pasan a ser gotitas de agua cayendo una a una encima de nuestro corazón... Este año es aquel en que la revolución tomará forma en nuestro interior...